La industria maquiladora de Ciudad Juárez sigue atrapada en un clima de incertidumbre, pese a la prórroga de tres meses que México obtuvo para la entrada en vigor de los aranceles impuestos por Estados Unidos debido al tráfico de fentanilo y la migración. Marcelo Vázquez Tovar, delegado regional de la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana (ANIERM), advirtió que, aunque la extensión representa un respiro temporal, el panorama para las plantas manufactureras sigue siendo incierto y complejo.
El delegado explicó que la prórroga coincide con el tercer trimestre del año, periodo en el que la industria maquiladora define su planeación financiera y operativa para el siguiente ciclo. Sin embargo, ante la falta de claridad sobre las acciones futuras del gobierno estadounidense, muchas plantas podrían verse obligadas a implementar paros técnicos, tras haber acelerado sus exportaciones en meses anteriores. Vázquez Tovar también señaló que la amenaza de un posible colapso del tratado de libre comercio ha paralizado la toma de decisiones clave para inversiones y contratación de nuevos proyectos.
La inestabilidad ya ha tenido efectos concretos en la economía fronteriza: entre 63 mil y 64 mil empleos se han perdido en el sector maquilador de Juárez en los últimos dos años, y más de 500 patrones han cerrado operaciones en diferentes sectores. Aunque algunas empresas han aprovechado la coyuntura para automatizar procesos y mejorar su eficiencia, el saldo general sigue siendo negativo para el empleo, en un entorno donde cada cambio de política comercial puede trastocar los planes financieros del sector.