Las y los diputados federales del PRI, encabezados por su coordinador Rubén Moreira Valdez, repudiaron enérgicamente la detención de varios jóvenes que, según afirmaron, ejercían legítimamente su derecho a la libre manifestación para protestar por la crisis de seguridad que atraviesa el país. El grupo parlamentario acusó al gobierno federal de convertirlos en “presos políticos” y de utilizar a las instituciones del Estado para reprimir la inconformidad social.
El PRI señaló que mientras más de ochenta ciudades tuvieron manifestaciones pacíficas contra la violencia y la inseguridad, el Gobierno de la Ciudad de México optó por confrontar y criminalizar a quienes protestaban. La bancada criticó que el régimen, en lugar de escuchar la voz ciudadana, “siembra división, limita libertades y fabrica descalificaciones” hacia quienes cuestionan las fallas en seguridad, economía y gobernabilidad. Asimismo, condenaron que un gobierno que se autodenomina de izquierda recurra —dijeron— a prácticas autoritarias que profundizan el clima de polarización.
Atendiendo indicaciones del presidente del PRI, Alejandro Moreno, y del coordinador Moreira, el Grupo Parlamentario informó que sus abogados brindarán acompañamiento jurídico a los jóvenes y sus familias, habilitando un contacto por WhatsApp para solicitar apoyo. Desde la Cámara de Diputados, exigieron la liberación inmediata de los detenidos, el cese de la persecución política y el respeto pleno a derechos como la libertad de expresión y manifestación. “México necesita un gobierno que escuche, no que castigue a quienes piensan distinto”, afirmaron.