En un evento trascendental para el Partido Revolucionario Institucional (PRI), más de 3 mil 200 delegados se reunieron en la Ciudad de México bajo la dirección de Alejandro Moreno, Presidente del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), para la 24ª Asamblea Nacional Ordinaria. La reunión no solo consolidó la cohesión interna del partido, sino que también marcó un hito al aprobar reformas fundamentales a sus documentos básicos, preparándose así para enfrentar los desafíos del presente político mexicano.
Durante la jornada, los líderes priistas confrontaron abiertamente los retos que atraviesa México, reafirmando su apoyo a la dirigencia de Moreno y comprometiéndose con una ruta de renovación y modernización. Este proceso busca transformar al PRI en una fuerza política que no solo defienda el régimen democrático y las instituciones, sino que también lidere las demandas sociales en contraposición a un entorno político cada vez más autoritario.
Uno de los puntos clave de la asamblea fue la aprobación unánime de las propuestas presentadas por la Comisión Nacional de Dictamen, orientadas a actualizar los estatutos, la declaración de principios, el programa de acción política y el código de ética partidaria. Estos cambios están diseñados para fortalecer al PRI y adaptarlo a los nuevos desafíos y dinámicas sociales de México.
En sus intervenciones, Alejandro Moreno y otros líderes destacados del partido subrayaron el compromiso del PRI con la democracia y su papel como una oposición constructiva y proactiva. Moreno enfatizó que el partido seguirá siendo un actor relevante en los grandes debates nacionales, asegurando que estarán dispuestos a trabajar en coalición cuando sea necesario, pero sin comprometer su independencia ni sus principios fundamentales.
En conclusión, la 24ª Asamblea Nacional Ordinaria del PRI no solo consolidó la unidad interna y la dirección bajo Alejandro Moreno, sino que también sentó las bases para un PRI renovado y fortalecido. Con reformas estructurales aprobadas y un compromiso renovado con su militancia, el PRI se posiciona como una fuerza política resiliente y determinada a enfrentar los desafíos políticos y sociales que enfrenta México en la actualidad.