Santiago González Reyes, director de Derechos Humanos, comentó que personal médico de la Dirección General de Centros Comunitarios brindó consultas médicas con entrega de medicamentos de forma gratuita a los migrantes que requirieron el servicio.
Indicó que algunos de ellos presentaban problemas respiratorios principalmente.
Comentó que la mayoría de las 1,200 personas que integraron la caravana son de origen nicaragüense, quienes tienen una excepción al Título 42, por lo que tienen acceso a ingresar a los Estados Unidos de forma inmediata.
Explicó que se trabajó de manera coordinada entre los tres órdenes de Gobierno, a fin de brindar seguridad a los migrantes.
Detalló que la caravana ingresó a esta ciudad en 19 camiones escoltados por 20 unidades de la Policía Estatal, poco más de 700 personas fueron alojadas en el albergue municipal Kiki Romero y el resto en el Leona Vicario.