La Cámara de Diputados Federal recibió ayer diversas propuestas legislativas relacionadas con la gestión y cuidado del agua en México. En un contexto donde el país enfrenta una de las sequías más severas y extensas en décadas, estas iniciativas buscan atender uno de los problemas más importantes en México: la escasez de agua.
Actualmente, más de 50 millones de personas en México experimentan algún tipo de escasez de agua, y aproximadamente el 10 por ciento de la población no tiene acceso a agua potable. Además, la calidad del agua disponible es insuficiente para el 30 por ciento de quienes sí tienen acceso.
El uso del agua en México está centrado principalmente en actividades agrícolas, seguido del abastecimiento público, la industria y la energía eléctrica. El país se encuentra entre los 25 países del mundo que enfrentan un mayor estrés hídrico, con un nivel de estrés hídrico «alto» y cada año se extrae una media del 40 por ciento del agua disponible para su uso. Más del 70 por ciento de los ríos, lagos y presas tienen algún grado de contaminación, y 157 de los 653 acuíferos subterráneos se encuentran sobreexplotados.
En este contexto, los diputados presentaron una serie de propuestas con el objetivo de fortalecer la gestión y cuidado del agua en México. Estas propuestas incluyen la reforma y a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos para establecer la facultad de la Cámara de Diputados para legislar en la materia hídrica y la creación de la Fiscalía Especializada en Delitos Ambientales.
Además, se propone la obligatoriedad de sembrar árboles y restaurar ecosistemas, como una forma de compensación por parte de los grandes usuarios de agua en el país, así como la obligación para empresas de contar con plantas de tratamiento de aguas residuales para mejorar la distribución, disponibilidad y calidad del agua para la población.
México cuenta con 653 acuíferos subterráneos, según información de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), y su sobreexplotación ha crecido de manera pronunciada a lo largo de los años, por lo que también se propone que los ejidatarios, comuneros y pequeños propietarios, así como los ejidos, comunidades, sociedades y demás personas que sean titulares o poseedores de tierras agrícolas, ganaderas o forestales, determinen áreas como reservas para la captación de aguas pluviales.
Estas iniciativas buscan fortalecer la protección del medio ambiente y del agua en México, promoviendo la participación y colaboración de diferentes actores, la aplicación de la ley en materia ambiental y la adopción de prácticas sustentables en la gestión del agua, por lo que es fundamental tomar acciones concretas para enfrentar los retos ambientales que enfrentamos y garantizar un futuro sostenible para las presentes y futuras.
La escasez de agua en zonas urbanas empeorará para 2050 debido al cambio climático y otros factores. Por lo tanto, estas iniciativas fueron catalogadas como de vital importancia para garantizar un acceso equitativo y sustentable al agua en México, y para proteger el medio ambiente y la salud de la población.